El Gato con Botas 2: El Último Deseo (Reseña)

Me encanta cuando no esperas nada de un producto (sobre todo de una secuela que pertenece a una franquicia empañada) y te sorprende de tal forma que te vuela la cabeza haciéndote reír, llorar y reflexionar.

Ese es el caso de El Gato con Botas: El último deseo, una secuela que nadie pidió y que no sabíamos que necesitábamos. Se tardó 10 años en llegar esta continuación y que de paso reaviva la saga de Shrek (recordemos que pertenece a ese universo donde los cuentos de hadas son una realidad con sus giros maduros), haciendo uso de las actuales técnicas narrativas visuales de la animación, mucho más fluida y vertiginosa. Ejemplo de ello tenemos Spider-Man: Into The Spider-Verse y The Mitchells vs The Machines.

Así que tenemos la animación CGI convencional que hemos visto en las películas de Dreamworks, pero en las secuencias de acción da paso a una animación híbrida con un estilo de dibujo dinámico que parece por momentos la tradicional 2D y que da mayor dramatismo y espectacularidad a lo que vemos en pantalla.

Por si fuera poco el diseño de personajes son una belleza, no solo en lo gráfico sino también en su trasfondo, las motivaciones y desarrollo, así como lo que representan para la trama.

La historia pone en una encrucijada al Gato con Botas, quien ya agotó ocho de sus nueve vidas y debe decidir entre seguir siendo ese legendario y arriesgado forajido o reevaluar su mortalidad y vivir el resto de su última vida como un gato común alejado de las aventuras y peligros que le gustan. Pero existe un elemento de cuento de hadas (¡Obvio!) que podría restaurar su status quo si así lo desea.

Estamos ante una joyita de la animación que debe verse en el cine.

Latest articles

spot_imgspot_img

Related articles

Leave a reply

Please enter your comment!
Please enter your name here

spot_imgspot_img